lunes, 7 de mayo de 2007

(salta, lunes 7 de mayo,1:25 am)
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Rojo el cielo vestido de sangre.Mirar la ciudad desde la altura como un mapa de luces cuadriculando la planicie ajena.Noche de luna que desparrama silencios de tenue luz sobre mi osamenta que pernocta casi ebria.
Los ojos de Soane abiertos como dos manos blancas a punto de agarrar el pan. Ríe,con dientes de mermelada platina,los caminos que va a cruzar.
Yo, un simio nauseabundo, domesticado entre la mutabilidad y los buenos modales de siempre.Perfecto el niñito de la sonrisa irónica actúa su escena de frambuesa,en camisas de colores para el viaje negro de las horas.
Gatitos de metal cuelgan sus movedizas colas balanceándolas desde las ventanas abiertas."El mundo es oro",dice una voz, pero mi ángel se oculta cuando se le escapa un soplido de alas detrás de mi oreja.
Una puerta esconde (¿qué puerta no esconde?) fantasmas añejos con olor a naftalina que bailan pétreos en el hollín su penumbra de pena sin alcohol.

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